Bombas de calor para climatización

El sistema más común de climatización en despachos y oficinas es mediante aire acondicionado a través de bombas de calor aire-aire.

Las bombas de calor tienen la capacidad de transferir el calor de un foco a otro y tienen unos rendimientos superiores al 350% en generación de frío (EER) o calor (COP) frente a la energía eléctrica consumida en determinadas condiciones térmicas especificadas por el fabricante del equipo.

Estos rendimientos varían en función de la temperatura exterior del edificio a climatizar, es decir, si por ejemplo utilizamos una bomba de calor aire-aire, contra más baja sea la temperatura del exterior, mas trabajo y por lo tanto más energía eléctrica le costara a la bomba de calor transferir el calor del exterior al interior del edificio.

Si la temperatura exterior es de media negativa en la temporada invernal, las bombas de calor aire-aire no son muy adecuadas por la caída del rendimiento, para estos casos en concreto es factible utilizar bombas de calor geotérmicas (agua-aire). Éste tipo de maquinas aprovechan el calor latente del interior de la tierra, superior al ambiente exterior,  para intercambiar el calor y transportarlo al interior del edificio a climatizar.

MEDIDAS DE AHORRO Y EFICIENCIA ENERGÉTICA

– Instalar equipos con variadores de frecuencia (tipo INVERTER) optimiza la utilización del compresor y por tanto disminuye el consumo energético.

– Instalar sistemas autónomos para el control de la temperatura en cada sala o despacho.

– Sectorizar la climatización por zonas en función su utilización.

– Instalar la bomba de calor aire-aire (equipo exterior) en zonas refugiadas del viento o zonas donde puedan absorber mayor calor ambiental.

– Limitar la temperatura en salas o despachos a 21º en invierno y 25º en verano.